Comentarios acerca de la vida nacional. Temas militares, política, seguridad, terrorismo, fuerzas armadas, prensa, radio y televisión, moral y ética ciudadanas. Chascarrillos militares, cocina de campaña, noticias diversas... Todo según los artículos 20 de la Consitución Española y 177 y 178 de las RR.OO. para las FA,s.

18 mayo 2005

39.- ¡Miserables!

Cada vez que unidades de nuestro Ejército abandonan España para cumplir una misión en el extranjero, multitud de plañideras se rasgan las vestiduras ante una posible baja. El Ejército cumple órdenes del Gobierno de la Nación, entre sus misiones se contemplan las de especial riesgo, y si algo pasa forma parte de lo que todos los militares estamos dispuestos a asumir.
Durante cincuenta años también, esta vez todos, hemos tenido momentos de dolor y duelo por las víctimas de los sangrientos atentados de ETA (que Dios confunda). Las calles se han llenado de millones de españoles que hacían patente su dolor, exigían justicia y trataban de confortar a las familias de los asesinados.
Pero hete aquí que un visionario mesiánico ha recibido, de no sé dónde, una inspiración que le ha hecho pensar que él puede ser el que traiga la "paz" a España. Una mala paz siempre fue semillero de futuras guerras, y ésta va a ser una mala paz porque se trata de negociarla con quién ya está derrotado. Esto traerá un sinfín de agravios que harán perdurar los odios por muchísimos años.
Si además, debajo de tan noble propósito se oculta la intención de que el mesías se perpetúe en el poder, que figure en la Historia como el mediocre que trajo la "paz" a... ¿España? para lo cual ha preparado la operación con unas acciones previas: discriminación y separación de víctimas del terrorismo, nombramiento de un Alto Comisionado General de las diversas, por la gracia del visionario, Asociaciones de Víctimas del Terrorismo, actuaciones del tal Alto Comisionado para generar más víctimas todavía, ninguneamiento de la asociación que reúne a las víctimas de ETA (que Dios confunda), etc... Entonces hemos de pensar que no es que son bajas de un Ejército que se batió por una causa y paga su precio, sino que son las víctimas inocentes de un terrorismo ciego y mafioso que no se pueden cambiar por una "paz" ignominiosa.
Estos mariachis de la política han logrado, o están camino de ello, desarmar moralmente al pueblo español. Cambiamos un gallardo "sangre, sudor y lágrimas, y al que Dios se la dé San Pedro se la bendiga", por una actitud cobarde, amedrentada, que pasará factura al espiritu nacional (¡sí, coño, sí, espíritu nacional!), durante las próximas generaciones... De lo que quede...

Son, somos, unos miserables.