Comentarios acerca de la vida nacional. Temas militares, política, seguridad, terrorismo, fuerzas armadas, prensa, radio y televisión, moral y ética ciudadanas. Chascarrillos militares, cocina de campaña, noticias diversas... Todo según los artículos 20 de la Consitución Española y 177 y 178 de las RR.OO. para las FA,s.

06 enero 2011

426.- La Pascua Militar 2011 y... la austeridad.

No creo que nadie haya localizado una sola línea en todo este blog en la que me queje del sueldo de los militares.
Pero de eso a tragarme la "recomendación" de SM el Rey D. Juan Carlos, de ser austero, va todo un mundo.
Señor, mi abuelo en el año 20 ya era austero, lo fueron mi padre y mis tíos y lo hemos sido mis primos, mi hermano y yo. Jamás he conocido otra cosa que la austeridad que provenía de nuestra profesión.
Mi madre siendo jefe de sexta en un banco igualaba el sueldo de coronel de mi padre con más trienios que Cascorro. Mi primo, secretario general de SEAT, me preguntó siendo yo capitán de una batería de misiles (100 millones de $) cuánto ganaba. Con mi especial preparación técnica, horas extras (para entendernos, pero sin remunerar) a go-gó, le respondí que 45.000 pta. Pues bien, su respuesta fue: ganas menos que el peón peor pagado de las fábricas de SEAT. Cuando uno de los comandantes a mis órdenes puso en mi conocimiento que se iba al ministerio de Defensa, le pregunté si era por algún malestar y me respondió: mi teniente coronel, me he metido en la compra de una casa y en Defensa voy a cobrar un 30% más que tú. Me consta fehacientemente que un funcionario de Hacienda de menos nivel que yo cobra mensualmente más de 3000 € que compañeros míos, de mi nivel, en activo.
Y por último, como compañeros en la seguridad del estado, qué decir del indignante agravio comparativo que suponen los sueldos de la Guardia Civil y Policía Nacional comparados con los de diversas policías autonómicas y municipales, aunque aquellos tengan superior preparación y más horas de servicio.
A lo largo de mi vida, como todos mis compañeros, he desempeñado mi profesión sin contemplar las horas que dedicaba, cumpliendo sin rechistar y viendo como minúsculos beneficios se iban diluyendo con el tiempo, sin que la Acción Social del Ejército me beneficiara de cualquier manera y contemplando, más con pena que con rencor, cómo la Sanidad Militar se va haciendo más precaria cada día.
Señor, no soy ningún ejemplo de nada y estos casos que aquí relato son una gota de agua en el mar de nuestra profesión. Seguro que otros también tendrán sus gotas, y gota a gota...
En mi opinión, bueno sería dejar la mención de la austeridad para la inauguración del año judicial, la apertura del nuevo año legislativo en las Cortes (que tanta falta les hace) y para tantos otros estamentos del estado para los cuales no sólo no parece haber crisis sino que por el contrario nadan en la abundancia.
Y puestos a ser austeros, Señor, la austeridad bien entendida, como la caridad, empieza por uno mismo.