Comentarios acerca de la vida nacional. Temas militares, política, seguridad, terrorismo, fuerzas armadas, prensa, radio y televisión, moral y ética ciudadanas. Chascarrillos militares, cocina de campaña, noticias diversas... Todo según los artículos 20 de la Consitución Española y 177 y 178 de las RR.OO. para las FA,s.

28 agosto 2006

109.- El correo-e que nunca llegó.

Nota.- No se quemen leyendo esto, es un desahogo mío.

Cuando aún le daba el beneficio de la duda al "insigne doctor" al que me refiero en el post 96, le escribí el siguiente correo-e en respuesta a otro que él me envió y que figura, "literalmente", a continuación del mío. El sistema me lo devolvió. El insigne M.L.L. debió de fabricar una dirección sólo para dirigirse a mí.

**************

Muy señor mío:

No me preocupa identificarme ante usted, sí me preocupa hacerlo ante la red. No todo el mundo utiliza el medio adecuadamente.
Mi currículum no vale nada, todo lo que soy se lo debo a lo que podrá leer en las últimas líneas. He tenido la suerte de, más que mandar, liderar grupos de hombres en las más diversas situaciones, algunas poco agradables. Y es en estas últimas donde desaparece todo lo fútil de la vida y se descubre un nuevo sentido en el que tiene gran importancia la labor del líder, es a quien todo el mundo mira, del que se espera una solución, o que simplemente saque el conejo de la chistera (que también hay que saber) y dar las órdenes oportunas que todos esperan para cumplirlas sin pensar. Igualmente se descubre una dimensión desconocida en las relaciones humanas, en la que la comunicación entre todos suele alcanzar una calidad y rapidez que fuera de la situación sólo puede ser vagamente percibida.
Sin tratar de ser exhaustivo ello implica apertura de mente, responsabilidad (total, sin complementos atenuantes como política, etc...) iniciativa, conocimiento y saber manera, generosidad sin límites para aceptar la pérdida de lo más valioso que como seres humanos nos ha sido dado, solidaridad con los que te rodean, valores consolidados, dosis ilimitadas de idealismo y naturalmente condiciones de liderazgo, o al menos estar impuesto en lo que son las dotes de mando.
Se nos educa, por tanto, para llegar a conseguir un master en cada una de esas facetas. Y se hace con el beneplácito de cualquier ideología en cualquier país del mundo.
Suele ocurrir que aquellos que aceptan esa educación para nosotros, tienen una tasa bastante mayor que la nuestra de posturas... ¿laxas? ante la vida; y se quejan de que aquellos que permitieron educarse en determinado tipo de valores para conseguir fines que su ineptitud política, o ambiciones de todo tipo, les impide alcanzar, se conviertan, cuando afectan exclusivamente a lo que es la independencia y unidad de la Nación que recibimos, en un incómodo e insoportable Pepito Grillo.
Una cosa es criticar una actitud política, que desde mi punto de vista puedo hacer arrostrando las consecuencias con responsabilidad, y otra, la que usted critica, prácticamente leer el libro sagrado y que las meretrices se den por aludidas. Perdone la paráfrasis pero tendrá que acostumbrarse a mi subtono irónico-sarcástico si quiere volver a leerme.
Sigo.
No entiende mi intervención en su blog pero me da una manita acerca los supuestos beneficios económicos, gracias a los impuestos de los españoles (los mismos que le permiten a usted escribir su blog en la red) con los que realicé, sin las becas que disfrutaron muchísimos de nuestros dirigentes actuales, los estudios propios de mi monolítica manera de pensar.
En mi caso, ¡oh! casualidad, pincha en hueso. Los gastos relativos a los conocimientos teóricos los devengué yo antes de que se me descontaran en la carrera. Los de la experiencia práctica era un interés más del propio Estado que propiamente mío.
Defiendo la Constitución como imagino que todos los españoles. Perdone que no me pierda en el detalle pero he vivido en seis lugares distintos con mi padre y en casi diez por mi cuenta; y mis amigos, las constumbres asumidas, las cocinas que domino e incluso los idiomas o lenguas nacionales en los que pudiera chapurrear o conocer su léxico, harían tediosa esta comunicación.
Trabajo para el Estado pero no soy un funcionario al uso (aunque económicamente no me hubiera importado, no habiéndome, al igual que mis conmilitones, quejado jamás por ello) y menos todo eso que cita a continuación que, perdóneme de nuevo, si que suena a rancio y me da a mi vez la oportunidad de preguntarle, en función de su estatus económico y sus gastos suntuarios (al nivel que estén): ¿es usted un señorito? Tenga por seguro que no le llego a la suela del zapato.
Defenderé todo aquello que la Constitución y las leyes vigentes me permitan defender. Agradeciéndole en el alma que si en ello ve algún interés particular de mi gremio o mío propio, me lo comunique sin más dilación.
Por lo dicho en los primeros párrafos soy solidario y... corporativo. Corporativo, señor mío, es hacer lo que estoy haciendo en este momento. Si usted se refiere por corporativismo a la defensa a toda costa de actuaciones delictivas de algún integrante de los ejércitos, pincha de nuevo en hueso.
Nacemos todos iguales pero nos hacemos distintos. Si la cesión que hacemos de considerarnos iguales al paso de la vida es ser demócrata. Soy demócrata. ¡Pero ojo! ya no somos todos iguales.
Hay leyes y leyes. No es lo mismo una ley que suba el impuesto de la gasolina que otra que nos haga volver al medioevo, donde los derechos de los territorios estaban por encima de los de los individuos. La de la gasolina no requiere casi ni mayoría. La otra exige un referendum nacional. Hay que diferenciar lo que ambicionan unos advenedizos de lo que es el devenir de la Historia. Lamento que sólo sea de letras, hay un claro ejemplo matemático.
Imagino que se refiere a funcionarios, no al uso, que citaron el artículo del Código de la Circulación que se refiere a la obligación de circular con el cinturón de seguridad puesto y los que no lo quieren llevar se han dado por aludidos. Mire usted, los americanos, buenos o malos según y para qué se mire, tienen algo que llaman el focal point en cualquier actividad que necesite no perder el norte, en un debate, en acontecimientos difusos,... Bien, aquí no existe el focal point, únicamente el calcetín o el calamar. Se les da la vuelta y en paz.
Gracias porque de pasada he obtenido algunas líneas para enmarcar aunque con 60 años ya no soy incipiente en casi nada. Considéreme un mediocre aventajado. Menos mal que aún no ha empezado Antropología, le veía imaginándome, entre otras cosas, con un posible prognatismo acusado. Nunca me permito dar consejos, y si lo parecen que se borren la idea, hago reflexiones en voz alta.
Yo he estudiado a la gente tal como es, como si de un Gran Hermano se tratara. En la convivencia, en el estrés, en el riesgo, en la juerga... He tenido grandes sorpresas pero sería muy largo de concretar aquí. La utopía no existe y la gente necesita mitos, y ritos para relacionarse con el mito (recuerde el fenómeno Fórmula-1) incluso de leyendas como el Honorable Pujol con su milenario Esto último es muy raro pues es del mismo plan de estudios que yo y la verdad es que el plan era muy bueno.
Con todo ¿sabe lo que más me preocupa? No es el terrorismo, ni las connivencias en el crimen de lesa patria del 11 M, ni la inmigración, ni el paro (actual, al menos) Lo que más me preocupa es que si elegimos a nuestros representantes para eso, para que nos representen, ¿por qué se va generalizando cierto tipo de actuación en la que el populacho, por su forma de actuar, asalta las instituciones, ayuntamientos, parlamentos autonómicos o nacionales, y condiciona con insultos y amenazas la actuación, buena o mala, de sus representantes? Para fajarse están los políticos. Cuando la tensión trasciende y se utiliza al pueblo contra el pueblo, o sus representantes, mediante el empleo de violencia y amenazas, tan lejos de la libertad de expresión... Es el principio del fin de la democracia. Y luego que no se quejen los políticos. Todos los dictadores, civiles o militares, de cualquier signo, vienen a lomos de inmensas mayorías desencantadas, si fuera el caso, del nefasto juego democrático de sus políticos.


Atentamente, esperando que lo entienda.
(Firmo con mi nombre, apellidos y empleo militar)


*************
Correo-e que me envió M.L.L.

Ante todo, yo me identifico y ud. no, ¿algo que ocultar? Por otra parte, le felicito por su currículum académico, pero no acabo de entender su intervención en mi blog. Además de haber estudiado gracias a los impuestos de los españoles, ¿defiende ud. la constitución como la inmensa mayoría de madrileños, catalanes, vascos, gallegos, murcianos(mis amigos murcianos), melillenses... etc)?, o bien es de los funcionarios/terratenientes/oligarcas/señoritos que se creen dueños de las Españas milenarias y que incluso desafían la lealtad al rey interpretando la constitución según sus intereses particulares? Si es esto último,acabamos de inmediato la correspondencia. Pero... creo que no, que ud. es solidario, no corporativo, sí demócrata,sí respetuoso con las leyes votadas por todos y que si se cambian con el acuerdo la mayoría de la población, aunque no nos guste el cambio,también debemos respetarlas. Ante ello, lo que detecto es que ud, se molestó porque comenté, conreiteración y moderación, algunas actitudes de algunos funcionarios escasamente respetuosos con las leyes de mi país, el suyo también. En ese caso, como que no insulté y sólo opiné, tan sólo me queda mostrarle mi agradecimiento por su intervención en el foro.Por cierto, observo que no tiene ud la carrera de ciencias de la comunicación eu su currículum vitae: se la recomiendo, ya que veo en ud. a un incipiente escritor y polemista, en el buen sentido de la palabra, claro.yo, cuando me dejen jubilar, iniciaré la licenciatura de antropología social, para estudiar a las gentes a través de sus costumbres, ritos, mitosy leyendas.
atentamente y espero que entienda, cordialmente