69.- Los Cuerpos de Seguridad.

Desde aquí quiero hacer un homenaje a los Cuerpos de Seguridad de España.
Con muchas horas dedicadas, flaco el sueldo, poco conocidos cuando no ignorados o despreciados, constituyen nuestra mejor protección en un mundo cada vez más violento.

Su eficacia depende esencialmente de los medios puestos a su disposición, de leyes que a su vez les protejan de aquellos que tratan de "hacerles la cama" y fundamentalmente de la capacidad del Parlamento para hacer leyes eficaces así como, imprescindible, de la actuación de los jueces a la hora de aplicarlas.
¡Cuántas veces la eficacia operativa de nuestras policías se ha visto mermada, por no decir anulada, debido a la actuación de los jueces excesivamente "comprensivos" en la aplicación de leyes ineficaces!
Otrosí. Las policías deben ser respetadas. El desacato a la autoridad es algo que ya ni se contempla por los jueces, o si lo es se aplica a un pobre padre de familia que actuando individualmente ha perdido los nervios. Nunca contra malhechores, manifestantes vandálicos, mafiosos chulescos, políticos prepotentes...
Es necesario reforzar las atribuciones, y retribuciones, de los Cuerpos de Seguridad al tiempo que, naturalmente, ejercer un proporcional control y supervisión de actuaciones que pudieran ser excesivas.
Lo que trato de decir no constituye la panacea pero seguro que está incluído en las aspiraciones íntimas de cualquier policía.